sábado, 16 de febrero de 2008

EL ZAGAL DEL ALMA ENFERMA.


Hoy os voy a poner unas rimas que escribí hace tiempo, son unas rimas que cuando las enseño dan lugar a diferentes enfoques, unos las toman en serio y otros de forma jocosa. ¿cómo las escribí yo...? Adivinadlo.

EL ZAGAL DEL ALMA ENFERMA.

A la sombra de una higuera
de unas tierras de labranza,
un labriego con su hijo
de esta forma dialogaba:

Despabílate, chaval,
que la siesta ha sido larga,
hay que regar las lechugas
y recoger las patatas...!

El muchacho compungído
y con la cara alargada,
suspirando un par de veces,
a su padre contestaba:

-¡Padre, quiero irme de aquí,
que no me gusta la azada,
mi deseo es ser artista
y prefiero la guitarra...!

-¡Pájaros en la cabeza,
eso es lo que a ti te pasa,
pon los dos pies en el suelo,
no sueñes más y trabaja!
Ser artista es flor de un día
y no te asegura nada,
aquí tienes un futuro,
un negocio y una casa.
Estas tierras hijo mío
por mí fueron heredadas
y el día que yo te falte,
tú tendrás que administrarlas.

-¡Padre, quiero marchar lejos,
que tengo el alma alocada,
quiero irme a la ciudad
y ser artista de fama...!

-¡Hijo, piénsatelo bien,
que eso es cosa muy arriesgada,
que tenemos muchas tierras
y tu ayuda me hace falta...!

-¡Lo tengo ya decidido,
ya no soporto la azada,
padre, tengo que marcharme
porque tengo enferma el alma...!

Y abandonando el apero,
del morral sacó una barra
y se hizo un bocadillo
de panceta con fritanga.
Se caló su boina negra,
se ajustó un poco la faja
y sin más preparativos,
inició presto la marcha.
Su padre le llamó a voces,
pidiéndole que tornara,
le dijo: ¡No seas borrico...!
pero el zagal no escuchaba...

Y viendo que no atendía
ni a razones ni a palabras,
el labriego, usó su honda
y le atizó una pedrada.

El zagal del alma enferma,
segundos después tornaba,
con una herida en el cuerpo
y con el alma curada.

Pedro.M.B.

7 comentarios:

Mª Rosa Rodríguez Palomar dijo...

Me sugieren tus rimas el sueño que bulle dentro del alma del zagal y la necesidad del padre de su ayuda, por una parte, y también de tenerle cerca por otra.

Quizás el padre pensaba que no valdría su hijo para ser artista y de un modo rudo se lo hizo ver, tirándole una pedrada que cortaba sus alas.

Si el chico, después de la pedrada, sintió que su alma se curaba, era porque no creía firmemente en su sueño, quien cree en un sueño lo persigue siempre y, tarde o temprano, pese a las pedradas y zancadillas de la vida, termina yendo tras él.

No veo tus rimas en ningún modo jocosas, tanto por la tristeza del padre al tener que tomar la decisión de lanzarle una piedra para retener al hijo, como por el zagal que, en un principio tenía el alma enferma.

Pedro dijo...

¡Tú si que sabes...!

nieves dijo...

Si con la "imposición" de su padre, se le curó el alma al zagal, pienso que es que su padre (como suele ocurrir muy frecuentemente), conocía mejor a su hijo que él mismo. En muchas ocasiones, los hijos "juegan" a llevar al limite a sus padres,con ideas descabelladas, simplemente para saber hasta dónde pueden mantener el pulso. Es entonces cuando los padres, tienen que aplicar su autoridad,y sus normas de vida, en ocasiones con medidas "duras", que de inmediato esos hijos rebeldes, agradecen, pues en el fondo, ellos están reclamando la atención de los padres. Al final, lo acaban agradeciendo.
Se supone que la "pedrada" es una metáfora.

Dimpy dijo...

no puedo añadir mas a los comentarios anteriores; me hiciste parar y pensar, se puede trasladar esto a cualquier epoca y a muchas situaciones.

Gracias por darme este ratito y una ayuda para el dia a dia

Besitos

SANTIAGO LIBERAL dijo...

hola Pedro, ha sido un placer leerte y conocerte, gracia por pasar por mi blog, por cierto si cocinas también como escribes, dará gusto sentarse a tu mesa, te lo dice uno del norte.
un saludo, continuaré paseando por tu blog, es un placer. Un apunte más las imposiciones no son buenas, pero las pedradas jajajaja....

Pedro dijo...

¡Gracias por vuestros comentarios, como podéis imaginaros es todo pura metáfora, pero algo de realidad...¡también!
Un abrazo.

Jesús Máximo Esparza dijo...

Me gusta leerte Pedro, casi me veo reflejada en tu historieta.

Gracias, un beso.