viernes, 12 de diciembre de 2008

EL REGATEO.


Hoy toca entrada reciclada, la escribí hace exactamente un año y como tengo a medio hacer un par de entradas que se resisten las muy puñeteras, no me queda más remedio que recurrir a la moviola para seguir con mi "norma" de una entrada cada dos o tres días.

Me ocurrió en Moscú hará diez o doce años. Como era en Primavera o principios de Verano y en Moscú en esas fechas suele hacer un tiempo maravilloso, aprovechando que era domingo, me fui al Rastro que hay cerca de la estación de metro de Ismailova.
Allí, como buen Rastro, se puede encontrar prácticamente de todo y yo, además de las miniaturas de tallas, cajitas, esencieros, etc, etc, colecciono sellos y monedas. Dentro del apartado de sellos, me gustan mucho los temas de aviación y en uno de los puestos del mercado encontré un señor que tenía un clasificador con infinidad de sellos de todos los países, entre los cuales había una serie rusa de cinco sellos con aviones antiguos.
Dado que él solo hablaba ruso y mis conocimientos de esa lengua son limitadísimos por no decir nulos, empezamos el trato escribiendo números en un papel y empleando gestos y mímica.
Le pregunté (enseñándole un billete de 5 dolares) que cuánto pedía, señalándole la serie, a lo que el respondió (extendiendo las dos manos) que 10 dolares. La serie era muy bonita, pero yo sabía de sobra que los citados sellos no eran de gran valor y pensé que, siendo muy generoso, tres dolares eran más que suficientes y que estaban más que pagados.
El hombre se llevó las manos a la cabeza y me expresó que "ni en sueños", bajando su demanda a 8 dolares. Yo no estaba dispuesto a pagar más de 3 y así se lo hice saber. Él bajó a 7 y yo, que ya me estaba cansando, me guardé mi billete y dándole las "spasivas" de rigor inicié la retirada para otros lares.
No había dado media docena de pasos, cuando el hombre me llamó y me dijo que, de acuerdo tres dolares, como los llevaba sueltos, se los dí y él, con gesto de resignación, cerró el clasificador y me lo dio ENTERO. (había más de 500 sellos)
Me sentí como un trapo, pero la barrera idiomática no me permitió aclarar el malentendido, así que me puse a comprarle sellos y monedas que no me llamaban excesivamente la atención, me gasté 30 dolares y no le regateé ni un rublo.

Pedro.M.B.

6 comentarios:

Azul Purpura dijo...

Aiii que se me amontonan tus entradas!

Nada.... equilibraste con honradez la balanza. Y el ruso ganó un cliente.
Muy entrañable esta historia.

un Целую

Pedro dijo...

Azul Purpura.-
Ja,ja,ja, ¡yo sé decir spasiva y dasvidania...! ¡Ah sí y dobre utra, pero ahora es por la tarde...!
Un besusky.

Terly (Juan José Romero Montesino-Espartero) dijo...

En una ocasión le dijeron a un amigo mío que desgraciadamente ha fallecido, una frase que hoy yo te la digo a ti, "Eres un corazón con patas"
Un abrazo.

Pedro dijo...

¡Spasiva tovarich!
Un abrazovich

Merche Pallarés dijo...

Pedro, perdona, creí haberte escrito el comentario en este post. Una que ya está como la abuela Venancia... Besotes de nuevo, M.

Nina dijo...

Tu cara me dice que eres una gran persona, tu gesto con el ruso me lo confirma. Enhorabuena por tu blogg es ameno y hecho con inteligencia. Me tienes totalmente enganchada a EN SERIO Y EN BROMA.Un saludo desde la dehesa extremeña.